Los jugadores se reunieron y hablaron de sus falencias tras perder ante Brasil. Gustavo Quinteros analizó hasta las 02:00 de ayer la goleada.
El regreso de la selección ecuatoriana desde el estadio Atahualpa hasta la concentración, después de la derrota 3-0 ante Brasil, estuvo marcado por el silencio. En el bus de los seleccionados se escuchaban más las sirenas de los autos de la Policía que los escoltaron hasta el sector de Monteolivo, que las voces de los propios jugadores. No la pasaron bien al salir del escenario capitalino, pues fuera de este los hinchas, fúricos por la goleada en contra, los insultaron y pedían la salida del entrenador Gustavo Quinteros. Ya en la Casa de la Selección, el semblante no cambió y el silencio se mantuvo, pero tenía que romperse en algún momento. Comandados por uno de los más experimentados, el capitán Walter Ayoví, la plantilla se reunió para hacer un análisis de la presentación ante Brasil, el jueves pasado. El futbolista, de 37 años, dijo que el grupo fue autocrítico, la noche después de la goleada, muy aparte del examen que realizó el cuerpo técnico. La mentalidad está en superar la mala presentación y en enfocarse en el partido del martes contra el equipo peruano. Los jugadores se marcharon a sus habitaciones temprano para descansar, pero el entrenador Gustavo Quinteros permaneció despierto hasta las 02:00 de ayer en su habitación en la Casa de la Selección. En ese lugar, y con calma, trató de digerir la derrota que significó perder el invicto como local en estas Eliminatorias. Además, la Tricolor tenía 11 partidos consecutivos sin caer en Quito. El argentino utilizó ese tiempo para ver un resumen del partido, donde estaban las jugadas más destacadas y luego revisó todo el partido contra los brasileños. Anotó cada jugada, cada error o cada acierto de sus jugadores para poder corregir en poco tiempo lo que presentará en Perú. El estratega no se refirió a las fallas puntuales que mostró su equipo ante Brasil, algo que se manejará a la interna, pero sí puso énfasis en que siempre tratará de elegir a los mejores elementos para mostrar un fútbol preciso y ofensivo. Ayer por la mañana el sigilo rodeó a la Casa de la Selección. El viento de verano soplaba fuerte en el sector de la concentración, pero apenas había movimiento. Los jugadores, que suelen salir a los balcones de sus habitaciones para ver el paisaje, ya no lo hicieron y prefirieron mantenerse dentro hasta que sea hora de entrenar. El desayuno también fue la oportunidad para alargar el análisis interno de los seleccionados. En el comedor del lugar, con varias mesas afiladas para toda la plantilla, se habló del partido, de los próximos retos y de cómo les va a los jugadores que cambiaron de club. Arturo Mina, Michael Arroyo y Fidel Martínez alargaron la sobremesa y continuaron conversando cuando el resto de sus compañeros se retiró a sus habitaciones. Los 3 conversaban con un semblante serio, el mismo que mantuvieron los seleccionados en la práctica. Ya en la cancha principal de la Casa de la Selección, los futbolistas que no actuaron ayer y los que jugaron pocos minutos fueron los primeros en salir. El resto permaneció en el interior en trabajos de recuperación y zona húmeda. Los futbolistas cumplían con los trabajos físicos y con balón, pero permanecían callados. El sonido del silbato del DT y el impacto del balón con los zapatos se escuchaban con claridad. La prensa tuvo que dejar el lugar después de 10 minutos de observar la práctica, mientras Quinteros era el punto de atención de los jugadores y hablaba en el centro de la cancha. Todo para superar la goleada y revertir la imagen el próximo martes en Lima. (I) Quinteros: «El rendimiento me deja tranquilo» El entrenador de la selección ecuatoriana de fútbol, Gustavo Quinteros, se mostró satisfecho con el rendimiento del equipo en el partido con Brasil, a pesar del resultado. El DT dijo que hasta el minuto 25 del segundo tiempo, el encuentro fue parejo, pero que el penal, al que calificó de “dudoso”, cambió todo. “Lo único malo fue la expulsión de Juan Carlos Paredes y el resultado en contra. El rendimiento me deja tranquilo y además nos mantenemos en zona de clasificación, que es el objetivo”, dijo en rueda de prensa. Quinteros insistió varias veces durante su intervención que hay que mantener la tranquilidad, a pesar de los últimos resultados. “La derrota es dolorosa, pero estamos en zona de clasificación. Tenemos que enfocarnos en lo que viene y yo soy el primero que quiere jugar bien y ganar”. Mientras que Walter Ayoví, el único futbolista en hablar con los medios, fue menos positivo que Quinteros y dijo que el equipo “quedó debiendo”. “Tocamos fondo con lo de ayer (jueves), pero tenemos fuerzas para salir. Tuvimos una mala tarde, pero el grupo está consciente y comprometido en mejorar”, comentó el jugador del Monterrey. Quinteros invitó a entrenar a los jugadores de Independiente: Jacson Pita, Luis Ayala, Luis León, Gabriel Cortez, Junior Sornoza y Dixon Arroyo, para realizar un entrenamiento más competitivo. La ‘Tri’ viajará mañana, a las 18:00, rumbo a Lima para el partido del martes. (I)